¿Quieres saber cuáles son las diferencias entre jamón y paleta antes de decidir cuál comprar? Pues bien, la principal diferencia es que la paleta se extrae de la parte delantera del cerdo y el jamón de la parte trasera.
Sin embargo, más allá del lugar de origen del alimento, también existen otras características que distinguen a cada producto. ¡Veamos cuáles son!
El tamaño
Una diferencia entre paletilla y jamón que resulta clave al momento de elegir es el tamaño.
Indudablemente, el jamón es más grande que la paleta. De hecho, podemos encontrar jamones de hasta 85 o 90 centímetros, mientras que las paletas alcanzan (cuando mucho) los 75 centímetros.
Por supuesto, como imaginarás, esta diferencia también incide en el peso del producto. Un jamón puede sobrepasar los 8 kilos de peso; las paletas, por su parte, no suelen superar los 6 kilos.
El sabor
Aunque hay muchas similitudes entre el sabor de ambos, aunque los conocedores saben que existen diferencias al paladar.
El jamón, cuando es jamón 100% ibérico, tiene un toque meloso y variado, gracias a que cuenta con abundantes vetas. Además, estas, aparte de ese toque de sabor, le proporcionan al jamón una contextura suave y jugosa.
Por otro lado, el sabor de la paleta no cuenta con variantes, es uniforme y relativamente más intenso.
El rendimiento
El rendimiento también marca la diferencia entre paleta y jamón y este aspecto es determinante para elegir porque determinará la cantidad de grasa y carne que llevaremos a nuestra mesa.
La paleta suele proveer una cantidad menor de carne. ¿Por qué? Porque el omóplato constituye una gran parte del producto.
El jamón, por su parte, viene con un hueso más delgado, por lo que nos ofrecerá una mayor cantidad de carne para cocinar.
El tiempo de curación
Una pregunta frecuente es qué diferencia hay entre paleta y jamón respecto al tiempo de curación. Después de todo, ambos productos tienen necesidades de procesamiento y conservación diferentes.
Pues bien, el jamón ibérico es mucho más delicado en comparación con la paleta. De hecho, requiere cuidados más minuciosos y un mayor tiempo de curación.
Lo común es que el jamón requiera entre 15 y 35 meses, mientras que la paleta solo requiere entre 12 y 24 meses para completar el periodo de curación.
Jamón vs. Paleta: ¿cuál elegir?
La decisión es subjetiva, ya que va a depender de la cantidad de comensales y de las preferencias en cuanto a sabor y textura. Sin embargo, ten en cuenta los siguientes aspectos.
El jamón, al contar con una mayor cantidad de carne, es perfecto para preparar recetas abundantes y servir a muchos comensales. Mientras la paleta es una buena opción para quienes deseen cocinar menos raciones.
Puedes optar por el jamón si prefieres sabores más variados, melosos y con texturas más suaves y jugosas. Ahora, si te decantas por los sabores uniformes e intensos, la paleta será la mejor elección para tu paladar.
Desde Monjamón esperamos haber aclarado tus dudas en cuanto a las diferencias entre ambos productos y que esta información te sirva para hacer la mejor elección. Si deseas encontrar aquél que se ajuste a lo que tu necesites, visítanos. ¡Estaremos encantados de ayudarte a encontrar la mejor pieza para ti!
Te retamos a ver si en el plato eres capaz de distinguirlos?
Tú eres capaz de ver más diferencias? Te leemos en los comentarios!